Cómo utilizar los 6 sombreros para pensar en la toma de decisiones

Cómo utilizar los 6 sombreros para pensar en la toma de decisiones

Por Maria de la Paz Rego

El genial Edward de Bono, en 1985 escribió su fabuloso y aún muy vigente libro ¨Seis sombreros para pensar¨. Que más que un libro se ha convertido en una metodología para guiar y desarrollar diferentes procesos de negocios.

La metodología permite que pensemos cómo pensamos. Seis sombreros para pensar no sólo nos sirve para el abordaje de problemas, sino también para evaluar ideas, generar ideas, perfeccionar una idea existente, resumir y analizar alternativas, comprobar si nuestro pensamiento ha producido algún resultado beneficioso. El uso de los seis sombreros también es clave para el desarrollo de herramientas de creatividad como el Brainstorming.

Cada sombrero es una forma diferente de abordar la realidad, esa diferencia se marca a partir de los colores. Pueden ser usados, un sombrero por cada persona o una misma persona irse colocando de vez en vez, un sombrero diferente.

El sombrero blanco: debe ser objetivo  y neutral. Para ello analiza racionalmente hechos y cifras. No debe hacer interpretaciones ni dar opiniones. Representa la virginidad de pensamiento. Es concreto y busca centrarse en hechos y no en sentimientos.

El sombrero rojo: hace énfasis en el pensamiento intuitivo y emocional. Requiere decir ¨lo que se siente respecto del asunto analizado¨. Representa el sentimiento respecto de lo que se está analizando, es fuego y es calor. 

El sombrero amarillo: optimismo y pensamiento positivo. Se centra en analizar profundamente lo valioso. Busca fundamentos sólidos pero permitiéndose soñar. No es ingenuo pero sí se centra en lo positivo.

El sombrero negro: es el abogado del diablo. Todo se niega y se aborda desde la óptica pesimista. Se enfoca en lo malo, el riesgo, el error. 

El sombrero verde: es creativo, provocativo y busca nuevas opciones. Se basa en el pensamiento lateral. No evalua sino que busca la mirada distinta. Trata de pensar diferente a lo obvio, lo conocido y lo aceptado.

El sombrero azul: pone el eje en la visión grupal. Compara cada punto de vista, los resume y detecta los hallazgos grupales. Es control, organización, orden, planificado. Establece cómo deben usarse los diferentes sombreros.

Es conveniente usar el sombrero amarillo antes que el negro, porque si no condiciona la visión.

En el libro existen numerosas recomendaciones metodológicas sobre cómo combinarlos.

A modo de resumen la siguiente imagen muestra cómo combinar los sombreros según lo que la empresa desea resolver:

¿te ayudamos?